¿Dónde vas de vacaciones?

 La pregunta estrella en esta época del año es:

- ¿A dónde te vas? 

- Pues no me voy. ¿Tú, qué estás mal en casa? 

No quiero ser borde, pero es de traca asumir que cada día libre que tienes, has de irte a algún sitio. Hace falta dinero para irte a algún lado, lo primero, y cobro una mierda, pero no solo eso es que a veces descansar es estar tranquila en casa o por aquí.

Premisas del primer mundo: hay que irse, todo el mundo se va. 

Yo me voy cuando todo el mundo está en casa, no solo porque hay menos gente, si no porque además es más barato. Nos quejamos de la masificación, pero todo el mundo se coge las vacaciones en las mismas fechas y se va, porque hay una convención social de que hay que irse. Parece que si no te mueves de tu entorno sea algo malo, y cuando a la pregunta respondes con un "NO, no me voy" resulta un momento incómodo. ¿Cuál es el problema? En vacaciones me quedo en casa o hago cosas de vacaciones, porque necesito descansar del trabajo y de la rutina, lo cual no solo se consigue en el hotel, en el camping, o en otro sitio. También lo consigo en casa, con mis gatas, y supongo que si hubiera llegado a tener hijos, pues con ellos haciendo cosas y pasando tiempo que el resto del año no pasaría o haría. Pero en casa nadie está bien, con los niños en casa no porque te vuelven loco, la pareja todo son peleas, ... Nadie está bien en casa, con su vida y necesitan irse a una vida mejor. En su entorno no están bien y no quieren verlo, necesitan huir. No os gusta, no estáis bien en casa, no es mi problema, ni me siento pobre, ni desgraciada, ni triste, eso sí, vuestra cara muestra que vosotros sí. En mi situación, o cuando tenéis que estar en casa os sentís desgraciados, pues yo no. 

No me llega para irme por ahí cada vez que me toca un puente o vacaciones sí, pero es que tampoco lo veo necesario. Prefiero que sea algo extraordinario para apreciarlo más, disfrutar y divertirme más, pero sin abusar, que también me gusta estar en casa, quiero decir en mi entorno. Hago cosas que normalmente no haría en horas a las que estaría trabajando. Odio madrugar, y poder levantarme tarde cuando tengo días libres, me encanta es mi lujo de vacaciones. Me hace sentir de vacaciones. Hacerme un café bueno, un desayuno bueno, o una comida recién hecha (Me gusta hacerme la comida y cocinar) a una hora normal. Otra cosa que a la gente le da repelús, es ir a Barcelona, yo en vacaciones me acerco, si hay algo voy a verlo: las fiestas del Barri de Gràcia, La Mercé, los museos son gratis creo; el Port vell, el Parc Güell, o ¿Cuánta gente de la província ha visto la Sagrada Familia? Ya te digo yo que pocos, no está mal ir. Hay muchas cosas que hacer que no son lo de siempre, que no están lejos y que al fin y al cabo te hacen desconectar de la rutina, del trabajo etc, pero por convención te tienes que ir a otro sitio. Pues no me adapto a las convenciones, por obligación o por lo que sea, siempre he sido y soy diferente, ya estoy acostumbrada y me da igual.

¿Estáis bien en casa? No, no os gusta vuestra casa, a veces ni la pareja, a las pruebas me remito cuando en septiembre repuntan las separaciones y los divorcios. 

¿Tan difícil es aceptar que no estás mal por no hacer lo que hacen los demás? En cuanto dices que no te vas, es como cuando dices que no tienes hijos, o que no tienes pareja, les cambia la cara, la expresión o ves un pestañeo acelerado que muestra que se sienten incómodos por lo que han preguntado. ¿Me ves triste?¿O me ves amargada? Soy feliz con mi vida que no es normativa, y no necesito tu compasión. Pena me da quien no está bien en su casa, con su pareja, que se vuelve loco con los hijos y no sabe qué hacer con ellos, quien se separa en septiembre, quien no sabe qué hacer o se aburre... Pena me da quien sigue las convenciones sociales para acabar mal e infeliz. 

Me voy menos veces, pero lo celebro más, lo disfruto como si no fuera a volver a ese sitio y lo recuerdo con alegría. Cada uno elige su vida, o le viene dada por circunstancias que escapan a su control, lo importante es ser feliz, yéndote o quedándote. A mi me gusta salir, me gusta viajar, me gusta mi casa, me gusta descansar. Si tuviera más dinero haría más cosas, pero ni me considero pobre, ni estoy triste por ello, que cada cual viva su vida, pero sin compadecer a los demás por no hacer lo que todo el mundo. ¿Compadezco yo a los que tienen hijos o pareja? A veces sí, pero en general no tengo por qué. 

¿Me pregunto qué pasaría si yo los mirara como ellos me miran a mi?  Un día de estos voy a hacer el experimento social cómo reaccionaran: 

- ¿Tienes hijos? 

- Sí tengo hijos... bla bla bla 

- (cara de pena) ... 

¿Dejarán de hablar ante mi incomodidad y pena?